Naufragaré por las dunas desérticas del fondo de un vaso, buscando la salida de un laberinto imposible, que es mi propio crecimiento. Y mientras tanto el horizonte se extiende hasta el fondo con sensación de vértigo y temor, y al volver la vista atrás el mundo es más pequeño, y el principio de tu división se encuentra tan lejano que no puedes ni siquiera verlo.
Partiré la playa en dos cuando los cariños de los desaliñados hayan torturado un alma salvaje de cóndor. Partiré la playa en dos cuando hayan colmado de caricias mi sediento cuerpo.



